Ni yo misma lo sé | Megan Maxwell | El Estante de Rhiri

¡Buenas tardes! Hoy os traigo al blog la última reseña de las novelas de Megan Maxwell que acompañaban a la revista Diez Minutos este verano. Lo cierto es que hace semanas que terminé con él y que tenía pendiente de hacer la reseña, pero me ha dado una pereza máxima, así que me disculpo con vosotros. ¿Quieres saber más? ¡Sigue leyendo!



 
<<Con veinte años, una cree en princesas y en amores para toda la vida. Y eso es lo que le pasó a Nora cuano se enamoró de Girogio y se casó con él; hasta que a los cuarenta ese supuesto amor, al que ella había cuidado y ayudado a ascender en su carrera, se encapricha de una mujer más joven y comienza una nueva relación. De pronto, Nora se ve a sí misma sola, vieja, con hijos y sin trabajo, y sólo puede pensar en que su mundo se ha derrumbado. Pero gracias a la insistencia de su mejor amiga, Nora se da cuenta de que, a pesar de que Giorgio la ha dejado, todo puede ser diferente.

El destino, ese gran caprichoso que a veces nos amarga o nos endulza la vida, le depara a Nora muchas sorpresas, amores e ilusiones que nunca imaginó>>.



Lo cierto es que esta novela ya la leí cuando comencé con las novelas de Megan Maxwell y no dejó una enorme huella en mi cerebro. Así que cuando la compré pensaba que era otra y al comenzar a leerla cada día me desenganchaba más. De todas las novelas de Megan que he leído, creo que esta es la segunda que menos me gusta. 

Si ya de por si muchas de sus novelas son tópicas esta ya es la reina de los tópicos. La verdad es que me costó casi dos semanas terminarla, porque no me apetecía nada ponerme a leerla y lo mismo me pasó a la hora de ponerme a escribir esta reseña. La he comenzado cuarenta mil veces y esas mismas cuarentamil la he abandonado para tener que comenzar de nuevo días después.

Creo que me ha costado tanto leerla porque la protagonista me resulta TAN llorica y tan superficial, no hace más que pensar en su edad y en que no se merece lo que la vida le está ofreciendo en cuanto a amor. Es que hasta en la última página que todo es happy flower se pregunta si de verdad se merece todo eso o si acaso debería estar sola. En resumidas cuentas toda la novela es esa pregunta.

Así que por casi cinco euros que me costó no me duele haberla tenido en casa, pero sinceramente dudo mucho que vuelva a leerla o al menos próximamente, no es como la saga de las guerreras que me gusta leerla cada cuatro o cinco meses. No sé, es un libro más en mi vida sin pena ni gloria y conociendo vuestra opinión sobre Megan os podéis ahorrar su lectura. 

Si que me gustaría destacar al protagonista masculino y es que es un chico al que no le importa el qué dirán, creo que todos deberíamos de ser un poquito así, porque nos preocupamos demasiado del pensamiento de los demás cuando lo que tendríamos que hacer es preocuparnos de nuestra propia felicidad. 

Dicho esto, me despido por hoy, contadme en comentarios si habéis leído esta novela, si tenéis pensado hacerlo o si directamente la tacháis de vuestra lista. Nos leemos muy pronto, ¡besazos!








 

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